Quiénes somos

Madretierra es una panadería ecológica artesanal ubicada en Sobrescobio, en una zona rural del sur oriente de Asturias. Inicialmente estuvimos en la zona de Langreo y desde 1999 en el Parque Natural de Redes.

Obtuvimos la certificación para elaborar pan ecológico de masa madre en 1996, cuando los productos ecológicos todavía eran una anécdota en la oferta global y este tipo de certificaciones empezaban a aparecer en España.

Sólo fabricamos pan ecológico. Y lo hacemos porque creemos en él, sus virtudes y lo que te aporta:

¿Qué significa ser una panadería ecológica? Entre otras cosas que sólo usamos ingredientes certificados como ecológicos. Además, con excepción del trigo sarraceno, todos son de procedencia nacional 100%, principalmente de agricultores ecológicos de Castilla y León.

Para garantizar una calidad óptima de las harinas, elemento clave para obtener un buen pan, molemos nosotros mismos la mayoría de cereales que utilizamos en nuestras elaboraciones. De esta manera garantizamos que tengan la textura adecuada para cada tipo de pan.

Aunque esto no es todo. Conseguir y mantener la denominación de panadería ecológica supone pasar continuos controles del COPAE (Consejo de la Producción Agraria Ecológica del Principado de Asturias) y cumplir rigurosas condiciones.

Algunos ejemplos de acciones que llevamos a cabo son:

1. Debemos llevar un riguroso control de existencias y proveedores para garantizar que son de origen ecológico.
2. Garantizamos la trazabilidad de cada uno de ellos, teniendo perfectamente identificado cada lote que entra en nuestros almacenes y dónde se usa.
3. Trabajamos únicamente con combustibles naturales: Pellets y leña.
4. Nuestro consumo de energía busca ser eficiente y sostenible. Para ello todas nuestras instalaciones cuentan con un aislamiento que optimiza al máximo el consumo de energía, aprovechan la luz solar y utiliza luces LED.

¿Recuerdas 1992?

Fue cuando Barcelona organizó los Juegos Olímpicos, en Sevilla hubo una Exposición Universal, se inauguró el AVE e Induráin ganó su 2º Tour. En la radio Alejandro Sanz nos encogía el alma con “se le apagó la luz”, Nirvana volvía del revés el mundo de la música con su disco “Nevermind” y Sharon Stone hacía el cruce de piernas más famoso de la historia del cine.

Pero nosotros recordamos aquel año porque fue cuando construimos un pequeño horno para cocinar pan cerca de la casa rural donde vivíamos.

Aunque todavía no existían las certificaciones oficiales, nosotros ya consumíamos productos ecológicos. Aquel horno era el camino para conseguir pan fresco, artesanal y ecológico cada día.

Comprábamos los cereales en León, a productores de confianza que cultivaban sin productos nocivos para la salud y el medio ambiente. Y eso, junto con el mimo que dedicábamos a la fabricación, se notaba en los panes que salían de nuestro pequeño horno.

Así que primero la familia, luego los amigos y vecinos, más tarde los conocidos de estos… Poco a poco todo el mundo quería nuestro pan ecológico y artesanal. Y pasó lo que tenía que pasar: Convertimos aquel delicioso pan en nuestra forma de vida.

4 años después de construir aquel primer horno, ampliamos nuestras infraestructuras y solicitamos la certificación para elaborar pan ecológico al Consejo Regulador de la Agricultura Ecológica (CRAE).

Fuimos la primera panadería en obtenerla en toda la Cornisa Cantábrica, así como una de las primeras en España.

El espacio se nos quedaba corto y trasladamos el obrador a nuestra ubicación actual. Una que nos parece el entorno ideal para una empresa como esta: El Parque Natural de Redes.

En Ladines (Sobrescobio) construimos unas instalaciones más grandes y específicamente diseñadas en las que hoy seguimos fabricando nuestro delicioso pan ecológico artesanal.

Ese que llevamos a buena parte de Asturias y que te hará volver a disfrutar del pan. El pan de verdad. El de antes. El de siempre.