Aunque parezca una moda reciente, el pan de masa madre (o levadura madre) existe desde hace siglos. De hecho, fue el fermento que se utilizó en el levado de panes hasta inicios del siglo pasado, cuando las levaduras comerciales empezaron a proliferar.
Por su naturaleza, tiene unas características distintas a estas últimas y los procesos se ralentizan. Eso permite que los panes de masa madre sean más ricos en micronutrientes, más digeribles, tengan menor índice glucémico e, incluso, duren más tiempo frescos.
Son panes más suaves y con mayor volumen que los obtenidos a partir de levadura de panadería. También son más densos y presentan un sabor más característico.
En Madretierra elaboramos distintas variedades de pan de masa madre, todas de forma artesanal y respetando los tiempos de levado según la temperatura ambiente, sin cámaras de fermentación controlada. Esto garantiza una mayor calidad, mejor textura y más sabor.
Aquí tienes nuestro catálogo de pan de masa madre ecológico para que puedas disfrutar de todas sus ventajas.